España ha emergido como un destino clave para las producciones internacionales, consolidando su reputación con proyectos de alto perfil como House of the Dragon, Killing Eve, Kaos y la película Venom: The Last Dance. A medida que los costos de producción aumentan globalmente, la competencia entre países por atraer inversiones se intensifica, y España se posiciona como un socio confiable para los productores internacionales.
El evento “Shooting in Spain: UK Producers Evening”, celebrado en Londres en diciembre, reunió a destacados productores del Reino Unido y España para discutir las ventajas de rodar en el país ibérico. La clave de su atractivo radica en una combinación de incentivos fiscales accesibles, localizaciones variadas y un equipo altamente capacitado. Bianca Gavin, directora de producción de Pulse Films, destacó la importancia de contar con «incentivos de fácil acceso», lo que facilita la toma de decisiones para los productores.
España ofrece un incentivo fiscal competitivo: un ahorro del 30% en los primeros 1 millón de euros gastados en una producción y del 25% en el resto. Además, los gastos mínimos para calificar por estos beneficios son de 1 millón de euros, con un máximo de 20 millones por película o 10 millones por episodio. Estos incentivos no solo están disponibles a nivel nacional, sino también en tres regiones especiales con ventajas adicionales, como el País Vasco, Navarra y las Islas Canarias, que ofrecen descuentos fiscales de hasta el 60%, 50% y 54%, respectivamente.
Las Islas Canarias, en particular, han visto un auge en la última década, gracias a sus altos incentivos fiscales y una amplia diversidad de localizaciones. Andrew John McLeod, productor ejecutivo en Film Canary Islands, subraya la ventaja de contar con «un continente en miniatura», lo que permite trasladarse fácilmente entre diferentes escenarios.
El talento local también juega un papel fundamental en el atractivo de España. El país posee una infraestructura de producción robusta, con más de 320 días de sol al año, y una gran diversidad geográfica, que incluye 10 zonas climáticas distintas y una variedad de localizaciones naturales y artificiales. El personal local capacitado, junto con el respaldo en áreas como visados rápidos y la optimización de recursos de posproducción, hace que España sea un destino cada vez más popular entre los productores internacionales.
Según Vanesa Álvarez, directora de ICEX-Invest in Spain, el objetivo de su país es ofrecer un «paquete equilibrado», combinando incentivos fiscales con talento y recursos locales. Empresas como Banijay, Eleventh Hour Films y Clapperboard Studios ya están aprovechando estas ventajas. Andy Morgan, de Clapperboard Studios, destaca la importancia de la infraestructura y el personal local, subrayando que «tiene sentido contratar personal local, ya que conocen la zona y los recursos disponibles».
Con un mercado internacional cada vez más exigente, la combinación de incentivos fiscales atractivos, ubicaciones diversas y un equipo local altamente capacitado está consolidando a España como uno de los destinos más competitivos para la producción de contenido internacional.