La proliferación de las plataformas de streaming y los distintos modelos del negocio de la producción han hecho que cada región empiece a potenciar sus hub audiovisuales, soportado por la fuerza de empresas locales y por los esfuerzos gubernamentales por ofrecer incentivos y leyes que potencien la actividad. Es por ello que este panorama ha hecho de la coproducción uno de los modelos de negocio más escogidos para impulsar proyectos.
En un informe elaborado por Ailén Matthiess, Chief Operating Officer de BB Media, la ejecutiva reseñó que la región europea cuenta con más de 1.500 plataformas OTT que operan en 53 países y territorios, con más de medio millón de títulos únicos. Esta región, pese a no tener tantas plataformas como América, ha empezado a potenciar su catálogo, y hoy en día tiene la biblioteca más grande de películas y series, lo que lo convierte en una excelente oportunidad para la industria audiovisual, especialmente para las plataformas y para las productoras locales.
La consultora analizó las noticias recientes de la industria en España, Reino Unido y Francia, los tres principales países que producen la mayor cantidad de títulos locales en Europa. Observó que España ha anunciado la producción de 23 títulos locales en lo que va de 2023, suponiendo un aumento respecto al número de producciones anunciadas en años anteriores. En tanto, Reino Unido y Francia solo han anunciado 21 y 7 respectivamente.
Estos datos posicionan a España como uno de los hubs de producción más importantes de esta región, cuyo 70% del contenido producido en España son series, pese a que las principales plataformas tienen un enfoque en películas. ‘Esta tendencia refleja la creciente popularidad de las series entre los usuarios, lo que también es evidente en otros mercados europeos donde se produce un porcentaje aún mayor de series’, aseveró Matthiess.
Respecto a género más producidos, se encuentran el drama con un 41%, la comedia con un 18% y los gameshows con un 12%. En cuanto a otros mercados europeos, BB Media observó que los géneros se producen ‘se adaptan para satisfacer las demandas de los usuarios’.
‘De las 23 producciones en España, un tercio son producciones originales, estando prevista la mitad de ellas para su distribución en TV lineal. La 1 y Antena son los principales compradores de estas producciones originales españolas, y Amazon Prime Video y Disney+ también reciben al menos una producción original cada una’, agregó la ejecutiva.
En el renglón de largometrajes, de las siete películas en producción en España, solo una es una coproducción entre España y Perú, reportó la consultora. ‘Es interesante notar que el lanzamiento inicial de todas las películas ocurrirá en los cines. La mayoría de las películas españolas se hacen para el consumo local, y el 70% se produce específicamente para los territorios españoles. Sin embargo, el 30% restante pretende distribuirse globalmente. Será importante seguirlos después para ver si llegan a las plataformas OTT y cómo evolucionan los derechos de distribución y exclusividad’, reseñó.
Un punto interesante es que la producción local de series está concentrada por RTVE, compañía que produce casi un tercio de los títulos que se producen actualmente. Mientars qye en la distribución, el radiodifusor español también se encuentra vinculado a la distribución de estos títulos, los cuales se emitirán en los canales La 1 y TVE, también del grupo.
La segunda productora que más produce en España es Atresmedia Televisión, que también distribuye los títulos en su propia OTT, Atresplayer Premium y su canal lineal Antena 3. Las producciones se centran mayoritariamente en el territorio español, contando solo con la participación de empresas de otros países, como Francia y Reino Unido.
La consultora destacó el ímpetu que han tenido las recientes series españolas que han sido un éxito internacional como La casa de papel (Money Heist – Atresmedia), distribuida en más de 190 países y doblada o subtitulada en más de 30 idiomas. O el largometraje Dolor y Gloria, dirigida por Pedro Almodóvar y protagonizada por Antonio Banderas y Penélope Cruz, estrenada en más de 86 países y en alrededor de 400 servicios de streaming.
‘Estos ejemplos no solo mejoran la reputación de las producciones españolas, sino que también brinda oportunidades para que otras producciones europeas ganen reconocimiento a escala mundial’, precisó Matthiess.
Justamente la expansión de las plataformas de streaming en Europa también ha creado nuevas oportunidades para que los desarrollo independientes puedan ser impulsados y encuentren una audiencia más amplia. Filmin, Rakuten TV y Mubi son OTTs que están brindando venteo a producciones más modestas y de corte independientes, que generalmente suelen ser ignoradas por grandes streamers y que antes tenían problemas con la distribución. ‘Este panorama es particularmente importante para el contenido no convencional, como películas de autor, documentales y cortometrajes. Además, la capacidad de acceder a estos títulos a pedido, significa que los espectadores pueden acceder a contenido de una gama más amplia de culturas e idiomas, fomentando una mayor comprensión y apreciación de diversas perspectivas’, subrayó BB Media.
Fuera de España, las producciones de este país han alcanzado muy buen performance, por ejemplo, USA cuenta con la biblioteca en español más grande fuera de España, según destacó el reporte, seguido por Reino Unido, México y Argentina. ‘Vale la pena señalar que los dos primeros países no son naciones de habla hispana, lo que destaca el atractivo universal de estos títulos que pueden atravesar las barreras del idioma. La inmensa popularidad del contenido en español es más evidente en la amplia distribución de títulos como Salto al vacío (Daniel Calparsoro – RTVE), disponible en 412 plataformas OTT, o La Comunidad (Álex de la Iglesia) en 389 plataformas.
‘En resumen, la industria audiovisual española está experimentando un importante impulso en los últimos tiempos, situándose España entre los tres primeros países de Europa en la producción de títulos de actualidad. La mayoría de estos títulos son series y los géneros producidos se adaptan a las preferencias de la audiencia, lo que los hace muy atractivos para las OTT. El enfoque de la industria local se centra principalmente en la producción de contenido para los territorios españoles, con una parte importante destinada a la distribución global. El contenido en español ha ganado reconocimiento y popularidad en todo el mundo, con numerosos títulos que se distribuyen a nivel mundial y reciben elogios. El atractivo de estos títulos es evidente en la amplia distribución que reciben en varias plataformas OTT, lo que indica que es probable que la trayectoria de crecimiento de la industria audiovisual española continúe en el futuro’, concluyó.