El mercado de videojuegos enfrenta una revolución impulsada por soluciones basadas en la nube, transformando no solo la experiencia del jugador, sino también toda la cadena de valor de la industria. Un reciente análisis de Alix Partners, la adopción de juegos en la nube permitirá a los usuarios acceder a videojuegos de alta fidelidad en cualquier dispositivo, eliminando la necesidad de consolas o hardware especializado. Este cambio está respaldado por la expansión de infraestructuras de internet de alta velocidad, modelos comerciales en evolución y una experiencia de usuario mejorada.
El informe prevé que las ventas de consolas y hardware para PC disminuirán en 2025, mientras que el gasto de los consumidores se orientará hacia pantallas y dispositivos de streaming. En tanto, los modelos de suscripción están emergiendo como el principal motor de monetización para los títulos AAA, reemplazando las compras únicas. Además, los juegos para smartphones y consolas portátiles ganarán relevancia al aprovechar el procesamiento en la nube.
Lo digital como tendencia
La tecnología subyacente al gaming en la nube utiliza servidores remotos para ejecutar los procesos intensivos de CPU y GPU, transmitiendo el contenido a los dispositivos de los jugadores. Esto no solo reduce las barreras de entrada al eliminar el costo de hardware caro, sino que también permite una integración fluida entre plataformas, un aspecto clave en el contexto actual donde los consumidores buscan experiencias continuas y accesibles.
La consultora cree que el mercado de juegos en la nube se proyecta a alcanzar los $64 mil millones para 2030, creciendo a un ritmo acelerado del 44% anual, impulsado por mercados emergentes, como el de América Latina, donde las cónsolas y los juegos físicos experimentan altos valores debido a los costos de importación y las econompias locales complicadas.
Sin embargo, esta tecnología todavía enfrenta desafíos funcionales y comerciales, como la necesidad de velocidades de internet más rápidas y modelos de negocio adaptados a esta nueva realidad. Las compañías que logren resolver estas limitaciones, especialmente en términos de monetización y adopción masiva, estarán en posición de liderar esta transformación.
En 2025, se espera que grandes actores como Xbox y PlayStation amplíen sus modelos sin consola, mientras que el desarrollo de motores de juegos optimizados para la nube y centros de datos dedicados marcarán la pauta en inversiones estratégicas.
Justamente, Sony con su PS5, ha sido unos de los jugadores tradicionales que ha innovado en este aspecto, cuando hace un año, tras el relanzamiento de PS Network, incluyó un servicio de juego en la nube. Incluso la compañía, develó que para 2025 mejorará los servidores de dicados a ello, en incluirá nuevos países donde se lanzará esta opción.
Mientras que Microsoft con su Xbox Cloud Gaming, disponible también en su servicio Game Pass desde noviembre pasado, lo ha convertido en otro de los jugadores en innovar dentro de este segmento.